Llegan los primeros títulos finalistas del I Concurso de Creación de Juegos de Zacatrus

Zacatrus pondrá a la venta en noviembre los dos primeros títulos surgidos de su I Concurso de Creación de Juegos: Zoogitives, de Alberto Millán, y Kryptex, de José Joaquín Bernal. Estas propuestas destacan por su frescura y originalidad, reflejando el talento emergente del panorama de los juegos de mesa en España.

El Concurso de Creación de Juegos de Zacatrus se inició allá por 2022 y, desde entonces, se ha convertido en un pilar fundamental para la promoción de autores emergentes en el mundo de los juegos de mesa en España. Sergio Viteri, CEO y fundador de Zacatrus, explica que la principal motivación de la editorial al lanzar este concurso era brindar a los creadores una oportunidad para mostrar su talento sin restricciones de formato o temática. «Queríamos impulsar la creatividad en el sector, proporcionando a los autores una plataforma donde pudieran desarrollar y presentar sus proyectos», añade.

La recepción de la primera edición fue impresionante, con cerca de 400 propuestas presentadas. «La cantidad y calidad de los proyectos que recibimos superaron nuestras expectativas. La cantidad y variedad de ideas hicieron que el proceso de selección fuera realmente desafiante, ya que cada proyecto reflejaba un enfoque único y una dedicación palpable por parte de sus creadores», apunta. Desde ideas innovadoras hasta mecánicas sorprendentes, Zacatrus ha demostrado que el talento emergente en el sector de los juegos de mesa en España está en constante crecimiento. Además de descubrir nuevos creadores, la editorial involucró a su comunidad de seguidores, permitiendo que el público participara en la selección de los juegos y votara por sus favoritos. Este enfoque colaborativo es uno de los pilares del concurso, y Sergio considera que es clave para «fomentar la creatividad y el compromiso del público».

Zoogitives: Deducción animal por todo el mundo

Uno de los juegos finalistas de la primera edición, que se llevó el Premio del Jurado Externo, es Zoogitives, de Alberto Millán. El autor revela que la inspiración para este juego surgió a partir de la mecánica del clásico Master Mind. «Lo conocí un día en casa de mi suegra buscando entre los juegos antiguos que tenía en un baúl y me gustó esa idea de ir descubriendo un patrón basado en la idea de si un color está y si está en la posición correcta o no», explica Millán, quien añade: «Me parecía un concepto interesante para crear un juego de deducción, y tras darle una vuelta a cómo hacer algo similar, pero a la vez muy diferente, me di cuenta de que un set de seis dados que tuvieran cada uno de ellos la cara de un color distinto tendrían esta propiedad. Si los lanzaba sobre la mesa, en el resultado visible podría haber una combinación especifica de color y número, o tener solo el número, solo el color o nada». 

Con esto ya tenía dos de las tres variables clásicas en los juegos de deducción marcada por juegos como el Cluedo: arma, lugar y persona. «Necesitaba esa tercera opción para crear un reto de deducción bastante interesante, y para ello pensé que podía jugar con la idea de si el dado estaba en una casilla o fuera del tablero». Y esto llevó a la temática del juego, pues necesitaba nombrar las casillas y eligió ciudades para tenerlas bien distribuidas en un tablero con el mapamundi. «Ahora tenía que justificar la acción de quitar y poner dado y tomar un avión era la mejor forma de justificarlo, porque alguien no estaba en ninguna ciudad. Necesitaba que los personajes fueran fácilmente reconocibles y encontré en los testeos que era más fácil reconocer animales que rostros de personas».

A partir de ahí, decidió crear un sistema donde los participantes deben desentrañar el misterio de un robo, identificando quiénes fueron los animales involucrados y dónde se encuentran escondidos. «El concepto de jugar con ubicaciones y personajes reconocibles como animales encajó perfectamente», añade.

Zoogitives ofrece una experiencia de deducción intensa. Los participantes compiten por reunir pistas que les permitan resolver el misterio antes que los demás, y cada turno añade un nuevo nivel de tensión a la partida. Alberto explica que incorporó una mecánica que permite arriesgarse a resolver el enigma antes de tiempo, lo que genera momentos de alta tensión. «Quise darle un punto extra de tensión permitiendo a los jugadores que se arriesgaran a resolver sin tener una resolución al 100% a cambio de desvelar una de sus características. Esto hace que fallar te ponga en situación de desventaja respecto a los demás, por lo que hay que buscar siempre ese equilibrio entre arriesgarse y estar seguro de la respuesta», comenta.

Kryptex: Desafío mental para dos

El segundo título que surge de este concurso es Kryptex, un juego diseñado por José Joaquín Bernal y centrado en la resolución de enigmas lógicos inspirados en la figura de Leonardo da Vinci. «Yo creo que Leonardo es uno de los personajes más fascinantes que ha dado la historia, y en especial para los amantes de la ciencia y los inventos», afirma. 

La idea original del juego nació como un concepto abstracto, pero cuando el autor decidió añadir el Cryptex –nombre original del invento de Da Vinci– la temática cobró vida. «El artefacto de Leonardo servía para ocultar mensajes dentro (generalmente un papiro) que quedaban protegidos mediante una clave secreta. Para acceder a ella había que hacer girar las ruedas exteriores hasta formar dicha clave. Ahora bien, si intentabas abrirlo con una clave incorrecta, un ácido se esparcía por el interior y destruía por completo el papel en el que iba escrito el mensaje». El juego consigue, en cierto modo, transmitir esas sensaciones: mover los cubos, conseguir combinaciones que nos ayuden a descifrar la clave y tener cuidado porque si intentamos adivinar y fallamos, habremos perdido la partida. «Como digo, primero fue el diseño 'matemático' de los cubos –en mi opinión el corazón del juego y lo más difícil de ajustar–, luego se fueron añadiendo las cartas, los anillos de bloqueo y el sistema de creación de claves, estos últimos elementos ya con Leonardo sobrevolando por mi cabeza», apunta José Joaquín.

Kryptex es un juego competitivo diseñado específicamente para dos personas. Los participantes deben descifrar la clave de su contrincante utilizando cubos que giran y se combinan para crear diferentes patrones. Según el autor, lo que hace único a Kryptex es su diseño tridimensional. «Los jugadores deben manejar los cubos teniendo en cuenta la posición de todas sus caras y cómo interactúan con los cubos adyacentes», detalla.

Diseñar un juego exclusivo para dos personas tiene sus propios retos, y José Joaquín reconoce que mantener un equilibrio entre interacción y dificultad fue uno de los mayores desafíos. «Quería que cada partida fuera un toma y daca constante, donde cada decisión importara», comenta. La simplicidad de las reglas y la rapidez de las partidas hacen de Kryptex un juego accesible, pero con una gran profundidad estratégica.

El proceso de trabajo con Zacatrus también fue positivo para José Joaquín, quien destaca la fluidez en la comunicación con el equipo de la editorial. A pesar de que la colaboración se llevó a cabo de forma remota, el autor considera que todo fue ágil y eficiente. «Todo el proceso, desde la revisión de reglas hasta la producción final, ha sido muy sencillo gracias a la profesionalidad de Zacatrus», comenta.

Una colaboración que sienta las bases del futuro

Una de las claves de la producción de Zoogitives y Kryptex es la estrecha relación que Zacatrus establece con los autores, tal y como lo describe Sergio. «El proceso de colaboración con nuestros autores es fundamental para el éxito de cada juego que editamos. Una vez que hemos seleccionado los juegos, firmamos un acuerdo que establece una comunicación constante y abierta. En la fase de testeo, organizamos sesiones de prueba donde recopilamos impresiones y detectamos posibles fallos, valoramos las opiniones y resolvemos con ellos cualquier duda que surja. Si encontramos áreas de mejora, se lo comunicamos para que puedan realizar los ajustes necesarios», detalla.

Después de estas sesiones, proceden a chequear el manual del juego, el cual también es revisado por el autor para garantizar que todo esté alineado con su visión. Esta etapa es crucial para asegurar que la experiencia de juego sea fluida y satisfactoria para los usuarios. Y una vez que se finaliza la revisión del juego, se inicia la dirección de arte y el diseño de los componentes, donde el objetivo es mantener la esencia original del autor mientras se adapta el diseño para el mercado. «Este enfoque colaborativo no sólo enriquece el producto final, sino que también fortalece la relación con los autores, asegurando que cada juego sea una verdadera representación de su creatividad y visión». Claro que la colaboración con los autores no termina con la publicación del juego, sino que es sólo el principio. «Seguimos en contacto constante con ellos para planificar eventos, campañas de marketing y todo lo relacionado con el lanzamiento y promoción de los juegos», señala Sergio.

Ahora la editorial se encuentra inmersa en la tercera edición del Concurso de Creación de Juegos, que promete ser aún más emocionante. Sergio confirma que en ella se han extendido los plazos de presentación para dar a los autores más tiempo para desarrollar sus prototipos. «Queremos asegurarnos de que los creadores tengan el tiempo suficiente para pulir sus ideas y ofrecer lo mejor de sí mismos», explica. La fecha límite para la presentación de propuestas es el 10 de enero, y los diez prototipos finalistas no sólo recibirán premios, sino también un reconocimiento especial dentro del mundo de los juegos de mesa. En esta edición, al igual que en las anteriores, se repartirán un total de 1.750€ en premios, los cuales serán canjeables por juegos de mesa. 

El concurso también cuenta con un jurado compuesto por profesionales de la industria, incluyendo tanto a expertos internos de Zacatrus como a colaboradores externos reconocidos como Análisis Parálisis, Unna Juegos, Juegocondriacos, La Mesa de Dam y La Mazmorra de Pacheco. También se incluye la opinión del público, que vota y participa activamente en la selección. Según Sergio, este enfoque garantiza que los juegos seleccionados tengan el potencial de convertirse en éxitos comerciales y creativos. «La diversidad de opiniones y la experiencia del jurado son clave para asegurar que cada propuesta sea evaluada desde todos los ángulos», puntualiza.

Expectativas y futuro

Tanto Alberto como José Joaquín tienen grandes expectativas para el futuro de sus juegos. El primero confiesa que espera que Zoogitives se convierta en un referente dentro del género de deducción; mientras que el segundo considera que Kryptex tiene todo lo necesario para destacar como un juego de lógica accesible y profundo al mismo tiempo. 

Por su parte, Sergio tiene claro que Zacatrus seguirá apostando por iniciativas como este concurso para continuar descubriendo nuevos talentos y ofrecer juegos frescos y originales al público. «Estamos emocionados por ver lo que nos deparará la tercera edición y por seguir apoyando a los creadores que forman parte de esta comunidad tan creativa y apasionada», concluye.