¡De qué vas!, un party game que pone a prueba tus conocimientos numéricos

Cómo se juega

El objetivo de ¡De qué vas! es adivinar números, pero con una regla clave: no nos podemos pasar del número correcto. Las preguntas son curiosas y aleatorias, lo que añade un componente de sorpresa y risas, ya que muchas veces se trata de preguntas que pocas personas conocen con exactitud. Al principio de la partida, se barajan todas las cartas y se seleccionan diez al azar. Cada una de estas cartas contiene preguntas con respuestas numéricas que, por lo general, son bastante impredecibles.

El turno de juego

Cada turno comienza con una persona leyendo una pregunta en voz alta. Las preguntas cubren una amplia gama de temas, desde historia, ciencia, cultura popular, hasta cuestiones realmente extrañas, como "¿Cuántos litros de agua caben en la piscina más grande del mundo?". Quien recibe la pregunta debe dar un número como respuesta. El siguiente participante tiene dos opciones: o bien ofrecer un número superior o bien retar al anterior diciendo: "¡De qué vas!".

Aquí es donde entra la verdadera diversión: si el último número que se dijo resulta ser mayor que la respuesta correcta, la persona que fue desafiada se lleva la carta y acumula puntos de penalización, representados por "puntos de ganso". Por otro lado, si el número está por debajo de la respuesta correcta, la persona que desafió es quien se lleva la carta con sus puntos de penalización. Este sistema de retos añade tensión y emoción en cada turno, ya que cada cual debe decidir si confiar en su instinto o arriesgarse a perder por exceso de confianza.

El juego sigue esta dinámica durante diez rondas, acumulando "puntos de ganso" a medida que se avanza. Al final, quien tenga menos puntos de penalización ganará el juego.

Acciones especiales y variantes avanzadas

¡De qué vas! también ofrece variantes para personas más experimentadas. Existen cartas especiales que introducen reglas avanzadas como la posibilidad de duplicar puntos en situaciones específicas o realizar un doble desafío. Estas variantes añaden una capa extra de estrategia y hacen que cada partida sea diferente.

Además, las cartas que llevan una mayor cantidad de "puntos de ganso" son ideales para quienes buscan un reto mayor, ya que acumular demasiados puntos en poco tiempo puede poner en peligro su victoria.

Conclusión

¡De qué vas! es un juego sencillo de aprender, pero lleno de diversión. Su combinación de preguntas aleatorias, decisiones estratégicas y desafíos constantes lo convierten en un party game perfecto para romper el hielo en cualquier evento. Además, la posibilidad de desafiar a otros añade un nivel de interacción que lo hace ideal para grupos grandes. Además, contiene 360 preguntas, por lo que su rejugabilidad está asegurada.