Flowers, un reto de lógica y colores en un mundo de flores

Introducción

Flowers es un filler en el que cada persona intenta organizar su campo de flores de la forma más armoniosa posible, respetando unas reglas de agrupación numérica que añaden un desafío estratégico a la partida. Durante el juego, debemos seleccionar y colocar cartas con números del 1 al 4 en nuestra área de juego, formando grupos específicos que nos permitan puntuar sin infringir las reglas de colocación. Su mecánica sencilla y su enfoque abstracto hacen que sea una opción ideal tanto para quienes buscan un reto ligero como para quienes disfrutan de los juegos de lógica y patrones.

Cómo se juega

Cada partida comienza con una baraja de 108 cartas en cuatro colores, numeradas del 1 al 4. Se reparten las cartas en tres pilas, dejando visibles las cartas superiores de dos de ellas. Por cierto, el juego incluye un medidor de cartas para que los montones estén promediados en función del número de jugadores y no haya que contar cartas. 

Cada persona empieza con una carta aleatoria en su campo y, en cada turno, debe robar una nueva carta y colocarla en su área de juego, ya sea junto a otra carta o apilándola sobre una existente. La clave del juego está en respetar las restricciones numéricas al formar grupos de cartas. Un número 4 debe formar parte de un conjunto de exactamente cuatro cartas del mismo número, los 3 deben agruparse en tríos, los 2 en parejas, y los 1 no pueden estar adyacentes entre sí.

Al final de la partida, las cartas que no cumplan estas reglas se eliminan y restan puntos. Por otro lado, los conjuntos de cinco o más cartas adyacentes del mismo color otorgan puntos adicionales. Además, las cartas con mariposas suman puntos extra si están colocadas junto a una carta del mismo color.

El juego también cuenta con una variante «veraniega» en la que cada persona empieza con una carta especial de color púrpura, la cual debe mantenerse en su posición original y formar parte de al menos una agrupación válida para puntuar. En la modalidad en solitario, el desafío se mantiene con un sistema de puntuación basado en niveles de dificultad, en el que debemos optimizar nuestra colocación de cartas para alcanzar la mejor puntuación posible.

Valoración y conclusión

Uno de los puntos más destacados de Flowers es su accesibilidad y rapidez. Su mecánica de colocación de cartas es sencilla de aprender, pero ofrece suficiente profundidad para mantener el interés a lo largo de múltiples partidas. La combinación de planificación y azar en el robo de cartas garantiza que cada partida sea diferente, evitando que el juego se vuelva repetitivo.

En términos de jugabilidad, el reto de encontrar la mejor disposición para las cartas puede ser muy satisfactorio, pero también puede resultar frustrante cuando no encontramos la carta que necesitamos en el momento adecuado. 

Su estética es otro de sus atractivos, con un diseño abstracto de patrones florales que resulta agradable a la vista. Otra ventaja de Flowers es que se puede jugar tanto en solitario como con hasta cuatro personas, lo que lo hace versátil para distintos tipos de sesiones de juego. 

En conclusión, Flowers es un juego abstracto con mecánicas sencillas pero desafiantes, ideal para quienes disfrutan de los rompecabezas numéricos y la colocación de patrones. Su corta duración y su accesibilidad lo convierten en una excelente opción para partidas rápidas o para quienes buscan una experiencia de juego relajada pero con un toque estratégico.