DEWY cubierto de rocío

 

Creador: Alberto Camaño Pascual

Participantes: De 2 a 4

Duración: 30 minutos

Edad: +8 años

 

DEWY es el resultado de una inspiración que Alberto tuvo hace algunos años. "El proyecto me lo planteé como un desafío, con objetivos progresivos: hacer un buen juego, presentarlo a las editoriales, presentarlo a concursos, etc.; lo que el propio juego vaya demandando. Pero siempre tratando de disfrutar de cada paso del proceso", explica. 


Y en ese punto se encuentra ahora mismo. De hecho, todavía no ha tenido ningún contacto con editoriales, porque su propósito inicial es "hacer un buen juego, con todo lo que implica; crear un juego original, desafiante y visualmente sorprendente", añade. Para ello, está cuidando mucho los aspectos de producción y edición editorial, y lo llevará al evento Protos y Tipos que organiza la asociación Ludo entre los días 8 y 10 de marzo en Zaragoza.


Pero, ¿en qué consiste exactamente DEWY cubierto de rocío

Cada participante tiene un jardín de flores (un tablero) y un grupo de gotas de rocío de un color (tokens redondos de distintos tamaños). Las gotas puntúan según su tamaño, pero sólo lo harán aquéllas que estén encima, y en el jardín de los demás contrincantes. Además, podremos mover nuestras gotas en nuestro jardín para empujar y tratar de tirar otras gotas para que no puntúen. Así pues, tendremos que decidir el tamaño de la gota y en qué tablero la ponemos, si tratamos de puntuar o de evitar que puntúen otros, y también cómo mover las gotas. 


Una partida se desarrolla a lo largo de tres fases, con tres acciones en cada una de ellas: colocar las gotas, mover las gotas y puntuar. Gana quien tenga más puntos al final de las tres fases. El juego nos permite competir en una experiencia inmersiva, con interacción directa, y sin azar. Y el tablero inclinado en 3D añade un giro táctico al movimiento de las gotas.


Por último, concluye Alberto: "DEWY es accesible para personas con deficiencias visuales, e independiente del idioma".